Cómo estructurar una sesión de reflexión en equipo

 

Lo que necesita

  • Reserve una fecha concreta (¡no la posponga indefinidamente!)

  • Reúna a su equipo durante 1-2 horas

  • Haz que uno de tus compañeros de equipo actúe como facilitador para mediar y dirigir

  • Papeles digitales o analógicos/Post-it Notes

Introducción

Debido a la situación actual, muchos equipos se ven obligados a modificar y adaptarse al trabajo a distancia. Sus estructuras y procesos se pondrán a prueba, sobre todo en lo que respecta a sus habilidades de trabajo en equipo y comunicación, pero es más importante que nunca ser abiertos, honestos y lo más solidarios posible; estar agradecidos y apoyarse mutuamente.


Esta guía le inspirará y estructurará para reflexionar y mejorar la forma en que usted y su equipo colaboran. La sesión fomentará la cohesión y acercará al equipo, al hacer una pausa y reflexionar sobre cómo se sienten.

  1. Identificar los altibajos

    Es normal reflexionar sobre lo que hay que mejorar, pero uno de los errores que podemos cometer es no reconocernos mutuamente el mérito de las cosas que ya hemos conseguido. 

    • Haz que tu equipo dibuje individualmente una mesa en un papel y divídela en 2:

      • Subidones (cosas que te han animado o ayudado)

      • Bajas (cosas que te pesaron/te deprimieron)  

    • Con la tabla como guía, haz que tu equipo dedique 10 minutos a reflexionar y escribir una lista de lo mejor y lo peor que ha pasado en el último mes. Es importante que seas sincero contigo mismo y con tus compañeros.

    • Una vez que el equipo esté listo, pida a todos que compartan sus altibajos y expliquen por qué se sintieron así. El animador debe tomar notas, fomentar la participación y convertirse en mediador cuando las cosas se pongan difíciles.

  2. Debatir y fijar intenciones 

    Ahora que el equipo ha debatido sobre los puntos altos y bajos, las cosas pueden ponerse un poco en las nubes, así que vamos a establecer una estructura sobre las cosas que queremos seguir haciendo y las cosas que hay que mejorar para cada punto alto y bajo.

    • Al hablar de los altos:

      • ¿Cuáles son las similitudes y las diferencias?

      • ¿Por qué ha dado resultados positivos?

      • ¿Cómo podemos mantenerlo?

    • Al hablar de los bajos:

      • ¿Cuáles son las similitudes y las diferencias?

      • ¿Por qué nos ha hundido?

      • ¿Cómo podemos cambiar para que no vuelva a ocurrir?

  3. Obtener conclusiones

    Ahora que ya has identificado tus puntos altos y bajos y has encontrado formas de mejorar el trabajo en equipo, saca conclusiones sobre las cosas que hay que planificar y ponte manos a la obra con las cosas que el equipo acuerde comprometerse a hacer. ¡No te olvides nunca de anotarlas!

  4. Dar las gracias

    Antes de finalizar la sesión, pida a cada uno de los miembros de su equipo que escriba algo que agradezca de la sesión de reflexión y que lo comparta con el equipo. Esto ayudará a que la sesión sea un poco más ligera si los ejercicios anteriores fueron pesados y recordará las razones por las que están juntos como equipo.

Ha sido un placer guiarte en tu sesión de reflexión.

Si te interesa profundizar en la reflexión con tus equipos, echa un vistazo a nuestra serie de Tarjetas de reflexión, una herramienta sencilla y directa centrada en ayudar a los equipos a detectar y hablar de los problemas de forma visible y debatible.


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