Qué significa el diseño empresarial y cómo puede hacer que tus proyectos sean más fuertes

Es un hecho. Los creativos no quieren pensar en números. Suelen considerarlo la parte molesta y suelen dejarlo para el final del proceso. Pero, ¿es esa la mejor manera?

Cuando diseñamos identidades, carteles y sitios web, siempre pensamos primero en un sistema. Cada componente debe tener sentido y formar parte de algo más grande, el producto final. Diseñar una empresa es muy parecido a eso.

La práctica del diseño empresarial toma piezas y procesos de otras categorías como el pensamiento de diseño, el lean startup, los procesos centrados en el ser humano y las herramientas de transformación digital. Te ayuda a encontrar puntos, nuevas posibilidades y oportunidades de crecimiento.

Dominarlo, por supuesto, requiere formación y experiencia, pero si quieres empezar a aplicar algunos de sus valores fundamentales, empieza por hacerte estas preguntas:

¿Cuál es el USP de su empresa?
Intente identificar lo que le hace diferente. El punto de venta único. La razón por la que los clientes deberían decantarse por usted y no por la competencia.

¿Tienes un modelo de negocio explícito?
Sí, tienes que definirlo. Si no, ¿cómo crees que vas a mantenerte a ti y a tu equipo?

¿Qué tipo de cultura de empresa tiene?
La forma en que está estructurada su organización dice mucho de usted. Puede ayudarle a atraer y retener talentos, o dejarle con un equipo frágil.

¿Cómo busca nuevas fuentes de ingresos?
Si no es lo bastante ágil, puede perder oportunidades interesantes. Deja espacio para innovar dentro de tu equipo.

Por supuesto, hay muchas más cosas que puedes preguntarte, pero dejémoslo para el próximo capítulo. Al menos por ahora, empieza por lo básico e intenta dar prioridad al aspecto empresarial de tus ideas.